miércoles, 20 de junio de 2007

A LA HORA DE DESCONTAMINAR


Poco o nada sirvió el Transantiago para lograr su objetivo prioritario, descontaminar la capital.
Santiago nuevamente está aplastado por un enorme manto de mierda.
Pero negocios son negocios y es el sistema imperante implantado en dictadura.
Esto ha significado que los habitantes de las comunas de San Bernardo y parte de El Bosque ya no contemos más con un servicio de primer nivel y excelente frecuencia como los Expresos y Pullman, para trasladarnos desde y hacia Santiago en forma cómoda, rápida y segura durante todo el día.
Además se extirparon importantes recorridos de las poblaciones, como por ejemplo, la variante que transportaba a las personas desde el consultorio Carol Urzúa al hospital Barros Luco.
Cuando se terminó el servicio llovieron las promesas de las autoridades por “realizar todos los esfuerzos” para que los expresos nuevamente reiniciaran sus recorridos.
Se reunieron dirigentes de la coordinadora sur para susurrar su molestia y protestar casi en silencio.
Hubo declaraciones de buenos propósitos por parte de la intendenta, cuando recién asumió el cargo, del gobernador y se realizó una reunión con representantes de juntas de vecinos, funcionarios del Ministerio de Transportes, la alcaldesa, y los concejales para que estos recorridos retornaran.
Pero de los Expresos y Pullman nunca más se supo.
Se trasladaban casi 10 mil personas diariamente en ese servicio, lo que significaba un gran aporte a la descontaminación.

ESTACIÓN DE MONITOREO
Según expertos, los niveles de contaminación se mantienen debido a que no hay incentivos para el uso de locomoción colectiva; por la utilización de diésel en las industrias y el crecimiento de la ciudad, lo que genera más fuentes de emisiones fijas y móviles.
Los altos niveles de smog se están repitiendo en Santiago este año en comparación con el anterior, esto según cifras del Centro Nacional del Medio Ambiente (Cenma), entidad que trabaja junto al gobierno en el pronóstico de episodios críticos en la capital.
La calidad del aire se mide a través del Indice de Calidad de Aire por Partículas (Icap). De 100 a 200 puntos Icap, la situación ambiental es considerada como regular y de 200 a 400 Icap los niveles son peligrosos para la salud.
Este año se han registrado dos preemergencias ambientales, días en que se superan los 300 puntos Icap, lo que genera riesgo. Pese a que el gobierno había
anunciado que este año no se registrarían estos eventos críticos, la situación respecto del año anterior en cuanto a altos índices de material particulado (PM 10) se mantuvo.
La concentración de contaminación en Santiago este invierno tampoco bajó significativamente: llegó a un promedio de 52 Icap, mientras que 2004 tuvo un índice de 53 puntos.
Nuevamente la comuna de El Bosque fue una de las más afectadas con la nube gris que cubre Santiago y que ya es noticia a nivel internacional, como lo destacó con preocupación el diario El País, de España.
Preocupación que al parecer no es tan grave para las autoridades de San Bernardo, porque la comuna continúa sin una estación de monitoreo que mida la calidad del aire. En esta comuna no se conocen los índices de material particulado que se respira.

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